
Las cremas son uno de los elementos más versátiles y exquisitos de la pastelería, sirven para agregar textura y sabor a una variedad de postres, transformando un plato sencillo en una verdadera obra maestra.
Si alguna vez te has preguntado cuáles son los tipos de cremas en pastelería y cómo se aplican, este artículo lo vamos a explicar.
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Índice de contenidos
Crema Pastelera
La crema pastelera es una de las cremas más emblemáticas, se trata de una nata espesa y suave, elaborada principalmente con leche, yemas de huevo, azúcar y un espesante como la maicena.
El sabor se suele complementar con un toque de vainilla o cáscara de limón.
Usos en la repostería
Principalmente, se emplea en relleno de pasteles, tartas, profiteroles, eclairs, tartaletas y otros postres.
También se usa como base para otras cremas más complejas, como la crema diplomática o la crema Chiboust.
Gracias a su textura espesa y cremosa, la podemos encontrar en forma de capas en productos de masa hojaldrada.
Además de su en la repostería, la crema pastelera también puede servir como base para helados caseros o como acompañante de frutas frescas, como fresas o duraznos, para equilibrar su acidez.
Crema Chantilly (nata montada)
La crema Chantilly, también conocida como nata montada, es una de las cremas más ligeras y aireadas de la pastelería.
Esta crema se elabora batiendo nata líquida con azúcar glas y, a menudo, un toque de vainilla para darle un sabor más suave y dulce.
La clave para lograr una buena nata montada es no batirla demasiado, ya que puede pasarse y convertirse en mantequilla.
Usos en la repostería
Cubierta de pasteles, cupcakes, tartas de frutas, y bombones.
Acompañante de postres fríos, como mousse o compotas de frutas.
Relleno de bollerías o croissants, y puede ser aromatizada con diferentes ingredientes como licor, cacao o incluso purés de frutas.
Crema de Mantequilla (buttercream)
La crema de mantequilla o buttercream es una crema espesa y rica, que se prepara con mantequilla, azúcar glas y, en ocasiones, un poco de leche o nata para suavizar la textura.
Esta crema es bastante versátil y puede ser aromatizada con varios ingredientes, como chocolate, vainilla, café, o incluso frutas.
Usos en la repostería
Es común en la decoración de pasteles y cupcakes debido a su consistencia espesa, que permite trabajarla con mangas pasteleras para lograr diferentes decoraciones, como flores o bordes elaborados.
Es la crema más popular para fondant en tortas de bodas o cumpleaños debido a su capacidad para servir de base en la cobertura.
Puede usarse como relleno de pasteles y galletas. Algunas variaciones de la buttercream, como la crema de mantequilla suiza o la crema de mantequilla italiana, tienen una textura más suave y menos grasa, lo que las hace aún más fáciles de trabajar.
Crema Inglesa
La crema inglesa es una crema suave y líquida que se elabora con yemas de huevo, azúcar y leche, y se aromatiza con vainilla. A diferencia de otras cremas, la crema inglesa no lleva espesantes, lo que le da una textura fluida pero rica.
Usos en la repostería
Salsa para acompañar postres o como base para helados.
Perfecta para ser servida con puddings, flanes, o soufflés.
Se utiliza en la preparación de helados caseros, ya que actúa como base en el proceso de crema helada.
También puede emplearse para hacer sorbete o granizados con un toque extra de suavidad.
Crema de Queso (cream cheese)
La crema de queso es una crema espesa y ligeramente ácida, elaborada con queso crema, azúcar glas y, a veces, un toque de nata.
Esta crema tiene una textura densa y rica, y se emplea en coberturas y rellenos.
Usos en la repostería
Su sabor ligeramente ácido complementa los dulces de la base de galleta o los toppings de frutas frescas.
Además, es una excelente opción para usar como frosting en cupcakes y pasteles, ya que ofrece una textura cremosa y un sabor que equilibra la dulzura de otros ingredientes.
Una variante muy conocida de la crema de queso es el frosting de queso crema, que se emplea en la decoración de pasteles, como el clásico pastel de zanahoria.